sientiendo el ruido de los micros pasar. aun antes de abrir los ojos. adivinando por la nariz si el día está nublado o despejado.
ayer había olor a mar en la calle, todo indica que no veremos el sol hoy.
igual, manteniendo los ojos cerrados giro sobre la cama. la abrazo, siempre vestida, aun cuando se duerme desnuda, amanece vestida. siempre.
respiro fuerte, para sentirle el olor del pelo. es ella.
también podría abrir los ojos y descubrir que estoy en la cama de esa habitación de la costa de perú. o podría despertarme en un día nublado de la selva boliviana.
no se siente como una mañana en el 518 llendo a la escuela tan temprano. tampoco está en el aire el olor a tostadas con manteca derritiendose que preparaba mi viejo.
ni se escuchan los teros de la quinta donde vivía de chico.
si caminara con los ojos cerrados al baño no corro el riesgo de pegarme con la mesa de metal y vidrio del pasillo de la casa de mi abuela. tampoco sentiría el frio de los cerámicos y el posterior rechinar del tercer escalon de madera bajando muy temprano a encontrar a mis abuelos tomando mate.
desperté en tantos lugares. hasta hace un par de años había despertado en muchas casas de amigos, algunas veces en la costa y otras en casas de alguna novia o parientes.
pocas veces en habitaciones de hotel, unas pocas.
sabor pastoso en la boca, y todavía no abro los ojos.
tal vez, si tengo suerte es domingo, de una rutina que es tan extraordinaria como la falta de esta. no creo que tenga mucha rutina esperandome en los futuros almanaques. serán temporadas.
si tengo suerte no va a volver a sonar el celular, o la radio reloj, o no me va a llamar de nuevo mi viejo para que me levante. tuve un reloj pulsera que me duró muy poco, nunca me despertó. el sonido era muy débil y me lo robaron demasiado temprano.
idealmente me despierto y me vuelvo a dormir por 5 a 10 minutos. más que eso es peligroso, el cuerpo puede acostumbrarse, aún mas el cerebro.
despues es una seguidilla de olores y resplandores, de reflejos y sensibilidad absoluta de la piel cuando choca con la ducha. preferentemente me lavo la cara con agua fría justo antes de atacarla con la caliente de la ducha. y después, después, empieza otro día.
2.1.11
14.12.10
esha
ella tiene ojos bonitos, y bonita boca.
boca, una de las tantas bocas que dibuja.
ella tiene la risa facil, el cantito de lo que nunca se acostumbra.
tiene cejas que frunce.
tiene orejas que se distraen.
también tiene novio. novio.
tiene y no tiene pijamas. tiene estampadas las telas de sus ropas y tiene sueño en la cara.
tiene olor tibio. y pestañas largas.
tiene un trabajo, tiene dos trabajos. pronto no tiene casa. tiene compañero, pero no tiene casa.
tiene facilidades y un inglés fluido. tiene facebook, tiene mails tiene computadora.
tiene a su papá y a su mamá. tiene hermanos. tiene amigos.
ella tiene aristas. tiene sonidos hermosos.
canta rico, come lindo, débilidades también tiene.
tiene la piel suavecita, así, en diminutivo. y olorcito rico.
el pelo largo y de colores raros, y ojos lindos
ella tiene ojos lindos.
boca, una de las tantas bocas que dibuja.
ella tiene la risa facil, el cantito de lo que nunca se acostumbra.
tiene cejas que frunce.
tiene orejas que se distraen.
también tiene novio. novio.
tiene y no tiene pijamas. tiene estampadas las telas de sus ropas y tiene sueño en la cara.
tiene olor tibio. y pestañas largas.
tiene un trabajo, tiene dos trabajos. pronto no tiene casa. tiene compañero, pero no tiene casa.
tiene facilidades y un inglés fluido. tiene facebook, tiene mails tiene computadora.
tiene a su papá y a su mamá. tiene hermanos. tiene amigos.
ella tiene aristas. tiene sonidos hermosos.
canta rico, come lindo, débilidades también tiene.
tiene la piel suavecita, así, en diminutivo. y olorcito rico.
el pelo largo y de colores raros, y ojos lindos
ella tiene ojos lindos.
arbol desde otro arbol
En un árbol de Plaza Rocha, en La Plata, por la avenida 60, de lado de calle 8, crece otro árbol.
Sale de la yunta de dos ramas. Desde que lo ví por primera vez pensé en sacarle una foto, una foto cursi por cierto, pero lo pensé.
Eso fue cuando yo estaba en la secundaria, en un colegio a una cuadra de este árbol.
Un par de años más tarde, pasé en micro (hacia mi casa) por la misma plaza, y lo ví. Vi al árbol naciendo desde el otro árbol.
Todavía pienso en sacarle una foto si lo encuentro de nuevo.
Sale de la yunta de dos ramas. Desde que lo ví por primera vez pensé en sacarle una foto, una foto cursi por cierto, pero lo pensé.
Eso fue cuando yo estaba en la secundaria, en un colegio a una cuadra de este árbol.
Un par de años más tarde, pasé en micro (hacia mi casa) por la misma plaza, y lo ví. Vi al árbol naciendo desde el otro árbol.
Todavía pienso en sacarle una foto si lo encuentro de nuevo.
4.12.10
revisitar_
pie en la tierra
huella que va, norte que das
camino tras de mí para no encontrar
y la revuelta de las letras
que se enervan y se caen
cerró el libro y salió.
a la derecha al principio. bajó. preguntó y llegó.
la casa era en verdad una puerta desde ese lado.
una puerta de madera. picaporte al medio. falleba violable.
(...)
el ventanal se come la ciudad. las luces se comen la oscuridad cuando la luz se come la intimidad.
la luz es total desde el cuarto blanco. pero desde el lila es imposible no ver la suma de luciérnagas.
cortina da intimidad. cortina da misterio. cortina da incógnita.
pieza prescindible. pero atajo.
(...)
esa ciudad de ahí afuera es imposible de aprehender por más que se ve toda junta. en lo concreto es un laberinto. un laberinto en cuatro dimensiones. como todos no? no. (el desierto es el importante. es el de la única dimension. el laberinto lo mostró Borges a boca de antepasados orientales supongo. el desierto es
el tiempo hecho laberinto. la necesidad.)
aca la fatiga. aca la desmoralizante pendiente. aca perderse con nombre de curvas y calles y bajadas y escaleras y pasajes. y.
y encontrar. y descubrir. y que importa. todo es nuevo. casi todo dibujable. casi todo.
todo.si. todo.
sábado
llueve. llovía mejor dicho,
sentado en el marco de una ventana mirando luces mientras el agua tenía ganas de mojar los ojos,
ese momento donde las luces se hacen soles. le salen rayos.
pero no. para que,
no hay por.
que?
viernes
escribir. de golpe. tinta en papel. pero no sobre. pero no carta. pero si carta pero no sobre. pero no
correo.
y de que vale.
y si la respuesta no la tiene nadie. si la pregunta no hay que hacerla.
jueves
es un día raro. es un día en la casa
es un día de contar los clavos que sujetan las maderas de los pisos.
de encerrarse en un cuarto con papeles partituras guitarra y dedos.
pies
carpeta de pies en pisos diferentes
filmar
contar
corto
hoy
discutir
salir
caminar. caminar. caminar.
llegar a lugares conocidos despues de pasar por desconocidos. tener la certeza de estar ubicado y no poder perderse a propósito. imaginar. llover y encontrar ese paraguas necesariamente sin tela. solo armazón.
inmediatamente retrotraerse, a ese entierro.
un mirador y un muelle, y un supermercado de esos que pueden estar en cualquier lado del mundo. y que no importe. y sentarse con una berlinesa, o berlin o lo que sea. y nada más.
y despues asomarse al mar estrellandose entre piedras y pedazos de barcos. y con ese olor raro. con esa lluvia cayendo pero el sol de atardecer pegando en los ojos y poniendo cobre todo el mar picado.
huella que va, norte que das
camino tras de mí para no encontrar
y la revuelta de las letras
que se enervan y se caen
cerró el libro y salió.
a la derecha al principio. bajó. preguntó y llegó.
la casa era en verdad una puerta desde ese lado.
una puerta de madera. picaporte al medio. falleba violable.
(...)
el ventanal se come la ciudad. las luces se comen la oscuridad cuando la luz se come la intimidad.
la luz es total desde el cuarto blanco. pero desde el lila es imposible no ver la suma de luciérnagas.
cortina da intimidad. cortina da misterio. cortina da incógnita.
pieza prescindible. pero atajo.
(...)
esa ciudad de ahí afuera es imposible de aprehender por más que se ve toda junta. en lo concreto es un laberinto. un laberinto en cuatro dimensiones. como todos no? no. (el desierto es el importante. es el de la única dimension. el laberinto lo mostró Borges a boca de antepasados orientales supongo. el desierto es
el tiempo hecho laberinto. la necesidad.)
aca la fatiga. aca la desmoralizante pendiente. aca perderse con nombre de curvas y calles y bajadas y escaleras y pasajes. y.
y encontrar. y descubrir. y que importa. todo es nuevo. casi todo dibujable. casi todo.
todo.si. todo.
sábado
llueve. llovía mejor dicho,
sentado en el marco de una ventana mirando luces mientras el agua tenía ganas de mojar los ojos,
ese momento donde las luces se hacen soles. le salen rayos.
pero no. para que,
no hay por.
que?
viernes
escribir. de golpe. tinta en papel. pero no sobre. pero no carta. pero si carta pero no sobre. pero no
correo.
y de que vale.
y si la respuesta no la tiene nadie. si la pregunta no hay que hacerla.
jueves
es un día raro. es un día en la casa
es un día de contar los clavos que sujetan las maderas de los pisos.
de encerrarse en un cuarto con papeles partituras guitarra y dedos.
pies
carpeta de pies en pisos diferentes
filmar
contar
corto
hoy
discutir
salir
caminar. caminar. caminar.
llegar a lugares conocidos despues de pasar por desconocidos. tener la certeza de estar ubicado y no poder perderse a propósito. imaginar. llover y encontrar ese paraguas necesariamente sin tela. solo armazón.
inmediatamente retrotraerse, a ese entierro.
un mirador y un muelle, y un supermercado de esos que pueden estar en cualquier lado del mundo. y que no importe. y sentarse con una berlinesa, o berlin o lo que sea. y nada más.
y despues asomarse al mar estrellandose entre piedras y pedazos de barcos. y con ese olor raro. con esa lluvia cayendo pero el sol de atardecer pegando en los ojos y poniendo cobre todo el mar picado.
13.11.10
adjetivacion
un bowl verde con cereales deliciosos y leche deslactosada y una cuchara blanca y plateada.
una wacom negra, una pila chiquita chiquita, un computador lleno con teclas presionadas y un mp3 prestado. una carpeta eterna y casi negra, un libro ingenieril, una libreta violeta de hojas blancas, un huevo plástico demontable, una tijera filosa, mis muñecas dormidas.
todo eso sobre una mesa pequeña en la cocina-living-comedor-entrada
una wacom negra, una pila chiquita chiquita, un computador lleno con teclas presionadas y un mp3 prestado. una carpeta eterna y casi negra, un libro ingenieril, una libreta violeta de hojas blancas, un huevo plástico demontable, una tijera filosa, mis muñecas dormidas.
todo eso sobre una mesa pequeña en la cocina-living-comedor-entrada
11.11.10
9.11.10
8.11.10
4.11.10
el origen (nolan)

Volver a pensar. viejo cuento sobre un señor en la china que sueña ser mariposa y al final no sabe si es mariposa soñando ser hombre.
la misma historia
contada varias veces y en diferentes formatos, pero siempre te sorprende.
antes de ver titanic, ya sabías que se iba a hundir, pero igual la vieron millones.
inception.
el tiempo es distinto.
FRAGMENTO DE "EL PERSEGUIDOR" de j. cortazar
-Bueno, de acuerdo, pero antes le voy a contar lo del metro a Bruno. El otro día me di bien cuenta de lo que pasaba. Me puse a pensar en mi vieja, después en Lan y los chicos, y claro, al momento me parecía que estaba caminando por mi barrio, y veía las caras de los muchachos, los de aquel tiempo. No era pensar, me parece que ya te he dicho muchas veces que yo no pienso nunca; estoy como parado en una esquina viendo pasar lo que pienso, pero no pienso lo que veo. ¿Te das cuenta? Jim dice que todos somos iguales, que en general (así dice) uno no piensa por su cuenta. Pongamos que sea así, la cuestión es que yo había tomado el metro en la estación de Saint-Michel y en seguida me puse a pensar en Lan y los chicos, y a ver el barrio. Apenas me senté me puse a pensar en ellos. Pero al mismo tiempo me daba cuenta de que estaba en el metro, y vi que al cabo de un minuto más o menos llegábamos a Odéon, y que la gente entraba y salía. Entonces seguí pensando en Lan y vi a mi vieja cuando volvía de hacer las compras, y empecé a verlos a todos, a estar con ellos de una manera hermosísima, como hacía mucho que no sentía. Los recuerdos son siempre un asco, pero esta vez me gustaba pensar en los chicos y verlos. Si me pongo a contarte todo lo que vi no lo vas a creer porque tendría para rato. Y eso que ahorraría detalles. Por ejemplo, para decirte una sola cosa, veía a Lan con un vestido verde que se ponía cuando iba al Club 33 donde yo tocaba con Hamp. Veía el vestido con unas cintas, un moño, una especie de adorno al costado y un cuello... No al mismo tiempo, sino que en realidad me estaba paseando alrededor del vestido de Lan y lo miraba despacio. Y después miré la cara de Lan y la de los chicos, y después me acordé de Mike que vivía en la pieza de al lado, y cómo Mike me había contado la historia de unos caballos salvajes en Colorado, y él que trabajaba en un rancho y hablaba sacando pecho como los domadores de caballos...
-Johnny -ha dicho Dédée desde su rincón.
-Fíjate que solamente te cuento un pedacito de todo lo que estaba pensando y viendo. ¿Cuánto hará que te estoy contando este pedacito?
-No sé, pongamos unos dos minutos.
-Pongamos unos dos minutos -remeda Johnny-. Dos minutos y te he contado un pedacito nada más. Si te contara todo lo que les vi hacer a los chicos, y cómo Hamp tocaba Save it, pretty mamma y yo escuchaba cada nota, entiendes, cada nota, y Hamp no es de los que se cansan, y si te contara que también le oí a mi vieja una oración larguísima, donde hablaba de repollos, me parece, Pedía perdón por mi viejo y por mí y decía algo de unos repollos... Bueno, si te contara en detalle todo eso, pasaríamos más de dos minutos, ¿eh, Bruno?
-Si realmente escuchaste y viste todo eso, pasaría un buen cuarto de hora -le he dicho, riéndome.
-Pasaría un buen cuarto de hora, eh, Bruno Entonces me vas a decir cómo puede ser que de repente siento que el metro se para y yo me salvo de mi vieja y Lan y todo aquello, y veo que estamos en Saint Germain-des-Prés, que queda justo a un minuto y medio de Odéon.
Nunca me preocupo demasiado por las cosas que dice Johnny, pero ahora, con su manera de mirarme, he sentido frío.
-Apenas un minuto y medio por tu tiempo, por el tiempo de ésa -ha dicho rencorosamente Johnny-. Y también por el del metro y el de mi reloj, malditos sean. Entonces, ¿cómo puede ser que yo haya estado pensando un cuarto de hora, eh Bruno? ¿Cómo se puede pensar un cuarto de hora en un minuto y medio? Te juro que ese día no había fumado ni un pedacito, ni una hojita -agrega como un chico que se excusa-. Y después me ha vuelto a suceder en todas partes. Pero -agrega astutamente- sólo en el metro me puedo dar cuen porque viajar en el metro es como estar metido en un reloj. Las estaciones son los minutos, comprendes, es ese tiempo de ustedes, de ahora; pero yo sé que hay otro, y he estado pensando, pensando...
Se tapa la cara con las manos y tiembla. Yo quisiera haberme ido ya, y no sé cómo hacer para despedirme sin que Johnny se resienta, porque es terriblemente susceptible con sus amigos. Si sigue así le va a hacer mal, por lo menos con Dédée no va a hablar de esas cosas.
-Bruno, si yo pudiera solamente vivir como en esos momentos, o como cuando estoy tocando y también el tiempo cambia... Te das cuenta de lo que podría pasar en un minuto y medio... Entonces un hombre, no solamente yo sino ésa y tú y todos los muchachos, podrían vivir cientos de años, si encontráramos la manera podríamos vivir mil veces más de lo que estamos viviendo por culpa de los relojes, de esa manía de minutos y de pasado mañana...
(gracias http://www.elortiba.org/cortazar3.html)
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